Oh, Glorioso San Cayetano, Padre de la Providencia.
No permitas que en mi casa, me falte la subsistencia, y de tu liberal mano, una limosna te pido, en lo temporal y humano.
Providencia, Providencia, Providencia.
(Es costumbre ponerle una vela los días 7 de cada mes).
No hay comentarios:
Publicar un comentario